Mi filosofía de la enseñanza se basa en que el ser humano es interactivo, pensante y reflexivo, participativo, que se integra en una sociedad en donde no puede vivir aislado por que necesita de los demás.
Por tanto la tarea central es ayudar a formar gente capaz de proyectar en sociedad, formar ciudadanos democráticos, trascendentes hacia una nueva cultura de transformación, que aprenda a vivir en armonía, que logre enfrentar los retos educativos para una sociedad con futuro con una participación a nivel mundial.
La tarea central de la docencia que desarrollo es formar alumnos reflexivos que aprendan a aprender con un sentido crítico e innovador a través de las competencias generales que les permita enfrentar la problemática de su vida cotidiana, así también para que logre enfrentar los retos educativos de manera individual en su formación profesional futura.
Considero que no existe un modelo que sea muy exacto, para enseñar a aprender, pero pienso que se deben retomar las estrategias que nos ayuden a lograr que nuestros alumnos logren aprendizajes firmes y duraderos que aprendan a ser reflexivos, analíticos y críticos, adaptando los modelos de acuerdo a su realidad, a su contexto y a su cultura de manera más práctica.
Por lo tanto el paradigma de enseñanza al que trato de ajustar mi comportamiento y actitudes se basa en la teoría constructivista de Piaget aunque cabe señalar que todas las teorías tienen su validez es por eso que retomo aprendizajes de las que más me ayuden en la tarea de enseñar por que cada una aporta los elementos necesarios, en la formación del individuo.
Es por eso que es de vital importancia generar un clima de confianza entre maestro alumno y padre de familia, para que el alumno se sienta seguro de si mismo, y pueda ser participativo en todos los aspectos de su vida. Así pues la mejor forma de evaluar mi trabajo es mediante la reflexión constante de mi práctica docente.
Por tanto la tarea central es ayudar a formar gente capaz de proyectar en sociedad, formar ciudadanos democráticos, trascendentes hacia una nueva cultura de transformación, que aprenda a vivir en armonía, que logre enfrentar los retos educativos para una sociedad con futuro con una participación a nivel mundial.
La tarea central de la docencia que desarrollo es formar alumnos reflexivos que aprendan a aprender con un sentido crítico e innovador a través de las competencias generales que les permita enfrentar la problemática de su vida cotidiana, así también para que logre enfrentar los retos educativos de manera individual en su formación profesional futura.
Considero que no existe un modelo que sea muy exacto, para enseñar a aprender, pero pienso que se deben retomar las estrategias que nos ayuden a lograr que nuestros alumnos logren aprendizajes firmes y duraderos que aprendan a ser reflexivos, analíticos y críticos, adaptando los modelos de acuerdo a su realidad, a su contexto y a su cultura de manera más práctica.
Por lo tanto el paradigma de enseñanza al que trato de ajustar mi comportamiento y actitudes se basa en la teoría constructivista de Piaget aunque cabe señalar que todas las teorías tienen su validez es por eso que retomo aprendizajes de las que más me ayuden en la tarea de enseñar por que cada una aporta los elementos necesarios, en la formación del individuo.
Es por eso que es de vital importancia generar un clima de confianza entre maestro alumno y padre de familia, para que el alumno se sienta seguro de si mismo, y pueda ser participativo en todos los aspectos de su vida. Así pues la mejor forma de evaluar mi trabajo es mediante la reflexión constante de mi práctica docente.
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